Un artículo de revista publicado recientemente de investigadores de BTQ, una startup que trabaja para construir tecnología blockchain que puede resistir los ataques de computadoras cuánticas, ha propuesto una alternativa al algoritmo de prueba de trabajo (POW) que involucra tecnología cuántica.
La prueba de trabajo es un mecanismo de consenso de blockchain que asegura la red de bitcoin. Los participantes se atraviesan a través de grandes cantidades de problemas matemáticos para validar las transacciones. Algunos han criticado el proceso como demasiado intensivo en energía, mientras que otros han argumentado lo contrario.
La computación cuántica implica alejarse de un proceso que depende del código binario, los y ceros, que abren y cierran las puertas de transistores. Los bits cuánticos (qubits) existen en múltiples estados simultáneamente, aumentando ampliamente el poder computacional hasta el punto en que el cifrado moderno construido por las computadoras clásicas, que dependen de los transistores y el código binario, se ve amenazado.
En su artículo, los investigadores de BTQ proponen una alternativa cuántica llamada muestreo de bosones de grano grueso (CGBS). Este método utiliza partículas de luz (bosones) para generar patrones únicos, muestras, que reflejan el estado actual de la cadena de bloques en lugar de los rompecabezas matemáticos basados en el hash.
El muestreo aleatorio de estos patrones crearía cifrado, de la misma manera que los números aleatorios forman la columna vertebral de cifrado hecha por computadoras clásicas.
El muestreo de bosones se creó inicialmente para demostrar algo llamado supremacía cuántica, una prueba que determina cuándo una ecuación matemática es demasiado compleja para una computadora clásica.
Estas muestras se agrupan en categorías, llamadas contenedores, lo que facilita la validación de los resultados y confirma el trabajo del minero.
Este enfoque reemplaza los rompecabezas criptográficos tradicionales de POW con tareas de muestreo cuántico, reduciendo significativamente el consumo de energía al tiempo que garantiza que la red permanezca segura y descentralizada.
Si bien la propuesta de BTQ es teóricamente interesante, lograrla requeriría una horquilla dura de la red de bitcoins con mineros y nodos que reemplazan su hardware existente basado en ASIC (las computadoras hechas únicamente para el mecanismo de consenso POW) con infraestructura lista de cuántica.
Esto ciertamente sería un esfuerzo hercúleo y podría resultar en una bifurcación como se ve con las guerras de tamaño bloque de años pasados.
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