Las reservas de Bitcoin de Bután han aumentado silenciosamente a más de mil millones de dólares, posicionando al pequeño reino del Himalaya como un actor único en el mundo de la riqueza soberana.
Según datos de Arkham Intelligence, Druk Holdings, propiedad del gobierno de Bután, habría acumulado más de 12.500 BTC, lo que marca un compromiso significativo con los activos digitales en medio del creciente interés en las criptomonedas como activo estratégico.
Reserva estratégica
Si bien las inversiones en criptomonedas de Bután no son nuevas, la posición del reino como importante poseedor de Bitcoin ha atraído nueva atención tras la victoria electoral de Donald Trump.
Los defensores dentro de la comunidad criptográfica han especulado durante mucho tiempo que una reserva de Bitcoin liderada por Estados Unidos podría convertirse en una realidad, especialmente con el apoyo de Trump a los activos digitales y la desregulación. Los legisladores ya han presentado un proyecto de ley para crear tal reserva para EE.UU., mientras que el propio Trump ha dicho anteriormente que se aseguraría de que EE.UU. no venda el Bitcoin que ya posee.
Bután, que comenzó a construir sus reservas de Bitcoin hace varios años a través de la minería, ahora se encuentra en el centro de este diálogo global, no para iniciar un nuevo movimiento sino como ejemplo de cómo las naciones más pequeñas podrían navegar en la adopción de activos digitales.
La apreciación de las tenencias de Bután ejemplifica una estrategia con visión de futuro que podría servir como modelo para economías similares que buscan diversificarse más allá de las reservas convencionales.
La postura proempresarial de Trump y su apertura a la desregulación han alimentado las expectativas de que su administración podría respaldar a Bitcoin como un activo estratégico, potencialmente remodelando la forma en que Estados Unidos aborda sus reservas.
Los analistas financieros creen que una reserva de Bitcoin en Estados Unidos podría cambiar la dinámica de la riqueza soberana, influyendo en otros países para que adopten políticas similares. Esto ha dado lugar a muchas especulaciones sobre qué país podría ser el primero en hacer pública esta intención.
Adopción del estado-nación
El director ejecutivo de Satoshi Act Fund, Dennis Porter, recientemente provocó que la gente “adivinara” cuál fue el primer país en comenzar a acumular Bitcoin como activo de reserva, insinuando que conocía la respuesta.
Algunos especularon que se refería a Estados Unidos; sin embargo, otros rumores sugieren que podría ser uno de varios otros países, incluidos Qatar y los Emiratos Árabes Unidos, los cuales han sido la pieza central de tales rumores sin fundamento desde hace un tiempo.
El director ejecutivo de Apollo, Julian Fahrer, compartió una lista de los ocho principales fondos soberanos, incluidos los Emiratos Árabes Unidos, China y Noruega, que están bien posicionados para adoptar Bitcoin como parte de sus reservas nacionales.
Informes sin fundamento han avivado aún más esta especulación, en particular los rumores de que una entidad desconocida compra 100 Bitcoin diariamente durante un período prolongado. Inicialmente se rumoreaba que esta actividad era Qatar, pero esta actividad aún no está confirmada, lo que deja abierta la cuestión de si está vinculada a una entidad gubernamental u otro comprador institucional.
Si la administración Trump busca una reserva de Bitcoin, marcaría un cambio sin precedentes en la política financiera estadounidense, lo que podría influir en los mercados globales y señalar una nueva era en la adopción de activos digitales entre los estados-nación.