El apoyo bipartidista a las criptomonedas dentro del gobierno de EE. UU. está aumentando, con importantes implicaciones para el futuro de la regulación y la política de criptomonedas. Si bien los republicanos todavía dominan el lado pro-cripto del pasillo, el sentimiento negativo hacia la industria parece estar desinflándose.
En total, 310 políticos estadounidenses apoyan firmemente la industria de la criptografía, mientras que sólo 41 están firmemente en contra. Teóricamente, una mayoría de 2/3 de los republicanos en ambas cámaras sería suficiente para aprobar cualquier legislación a favor de las criptomonedas tal como está.
Según los datos proporcionados por Stand With Crypto (SWC), aquí hay una descripción general completa del panorama actual del Congreso con respecto a la legislación sobre criptomonedas:
Senado:
– Republicanos: 37 senadores están fuertemente a favor de las criptomonedas
– Demócratas: 6 senadores están fuertemente a favor de las criptomonedas
– Republicanos: 2 senadores están firmemente en contra de las criptomonedas
– Demócratas: 10 senadores están firmemente en contra de las criptomonedas
Cámara de los Representantes:
– Republicanos: 201 representantes están fuertemente a favor de las criptomonedas
– Demócratas: 62 representantes están fuertemente a favor de las criptomonedas
– Republicanos: 3 representantes están firmemente en contra de las criptomonedas
– Demócratas: 26 representantes están firmemente en contra de las criptomonedas
Totales:
– Republicanos: 238 representantes están fuertemente a favor de las criptomonedas
– Demócratas: 68 representantes están fuertemente a favor de las criptomonedas
– Republicanos: 5 representantes están firmemente en contra de las criptomonedas
– Demócratas: 36 representantes están firmemente en contra de las criptomonedas
Tenga en cuenta que los datos de SWC incluyen candidatos tanto en ejercicio como retadores tanto para el Congreso como para el Senado.
La industria de las criptomonedas está siendo testigo de un cambio significativo en el apoyo político dentro del Congreso de los EE. UU., y ambas cámaras muestran distintos grados de entusiasmo por las políticas favorables a las criptomonedas.
Existe una notable división partidista en el Senado en materia de criptografía. Un número sustancial de senadores republicanos se han posicionado como fuertemente pro-cripto, lo que indica su voluntad de apoyar la legislación que favorezca a la industria.
Si bien hay cierto apoyo del lado demócrata, un contingente ligeramente mayor de senadores ha adoptado una postura fuertemente anti-cripto. Esta división sugiere que la aprobación de una legislación criptográfica integral en el Senado puede enfrentar desafíos, lo que requerirá cooperación bipartidista para superar obstáculos potenciales.
La Cámara de Representantes presenta un entorno más favorable para los proyectos de ley relacionados con las criptomonedas. Tanto los representantes republicanos como los demócratas han mostrado un fuerte apoyo a la industria de las criptomonedas, con una mayoría significativa de republicanos y un número notable de demócratas alineándose como pro-cripto. Este apoyo bipartidista en la Cámara sugiere una mayor probabilidad de que se apruebe una legislación favorable a las criptomonedas en esta cámara.
Curiosamente, la oposición a las criptomonedas en la Cámara es relativamente pequeña, con sólo un puñado de representantes de ambos partidos (29) adoptando una posición fuertemente anti-cripto. Esta resistencia mínima podría facilitar la aprobación de proyectos de ley relacionados con las criptomonedas, siempre que obtengan suficiente respaldo de la mayoría pro-cripto.
El panorama general del Congreso indica un creciente reconocimiento de la importancia de las criptomonedas, y muchos legisladores ven beneficios potenciales en el fomento de la innovación y el mantenimiento de la competitividad de Estados Unidos en el sector de tecnología financiera global. Sin embargo, las preocupaciones sobre la protección del consumidor, la estabilidad económica y la supervisión regulatoria continúan dando forma al debate.
Acciones legislativas recientes, como la aprobación de la Ley de Innovación y Tecnología Financiera para el Siglo XXI (FIT21) en la Cámara, demuestran el creciente impulso detrás de las políticas favorables a las criptomonedas. Este proyecto de ley, que tiene como objetivo establecer un marco regulatorio para los activos digitales, obtuvo el apoyo tanto de republicanos como de demócratas, destacando la naturaleza bipartidista de la legislación sobre criptomonedas en la cámara baja.
A medida que se acercan las elecciones de 2024, las criptomonedas probablemente se convertirán en un tema cada vez más importante en las campañas políticas y los debates políticos. La creciente influencia de la industria es evidente en la formación de Comités de Acción Política (PAC) centrados en las criptomonedas y sus sustanciales esfuerzos de recaudación de fondos para las próximas elecciones.
En conclusión, si bien el Senado presenta un entorno más desafiante para la legislación sobre criptomonedas debido a la división partidista, la Cámara de Representantes parece más receptiva a las iniciativas a favor de las criptomonedas. Esta dinámica sugiere que el camino a seguir hacia una regulación integral de las criptomonedas puede requerir una navegación cuidadosa de las diferentes posturas en ambas cámaras, centrándose en construir un consenso bipartidista para lograr resultados legislativos significativos. Sin embargo, con las elecciones de noviembre es posible que muchos de los políticos marcados como pendientes o neutrales por SWC puedan elegir un bando. Además, un cambio de gobierno podría conducir a un panorama considerablemente más amigable con las criptomonedas tal como están las cosas.