- La FSA de Japón planea mejorar las auditorías internas para que coincidan con los estándares globales y corregir las debilidades en la supervisión financiera.
- Los intercambios de cifrado no registrados están bajo escrutinio mientras la FSA destaca los riesgos de las plataformas que operan sin aprobación.
- Japón se centra en proteger a los clientes abordando los riesgos de seguridad y al mismo tiempo respaldar su creciente mercado de activos digitales.
La Autoridad de Servicios Financieros de Japón (FSA) ha anunciado planes para fortalecer los procesos de auditoría interna de las instituciones financieras. Esta medida incluye intercambios de cifrado, con el objetivo de mejorar el cumplimiento normativo y abordar las deficiencias de la industria.
Japón toma medidas enérgicas contra los intercambios de cifrado no registrados https://t.co/fZFnpS7WBs pic.twitter.com/rIbYt28aS2
– ALTS para GANAR 😎 (@PatrykReynolds) 28 de diciembre de 2024
La FSA declaró que una mesa redonda guiará estos cambios. Entre los participantes habrá representantes de organizaciones clave como la Asociación Japonesa de Intercambio de Criptomonedas y la Asociación de Banqueros Japoneses. La iniciativa se alinea con los estándares internacionales para cerrar las brechas existentes en las prácticas de auditoría financiera de Japón.
Reformas de auditoría para abordar las debilidades
La decisión surge tras un informe de seguimiento de la FSA que destaca las débiles prácticas de auditoría y escrutinio en las instituciones financieras. Para abordar estas inquietudes, la agencia revisará sus pautas sobre la situación y los problemas actuales. Estas actualizaciones introducirán medidas de auditoría mejoradas que se alinean con las tendencias regulatorias globales.
Las revisiones tienen como objetivo garantizar una supervisión sólida de los intercambios de cifrado, mejorando tanto la protección del consumidor como la estabilidad del mercado.
Los intercambios no registrados enfrentan un mayor escrutinio por parte de la FSA
La medida se produce en medio de una ofensiva contra los intercambios de cifrado no registrados que operan en Japón. Recientemente, la agencia emitió advertencias a cinco intercambios, incluidos KuCoin y Bitget, por operar sin el registro adecuado.
Los intercambios que atienden a clientes japoneses deben registrarse en la FSA o en una oficina financiera local. El incumplimiento genera preocupaciones sobre la seguridad de los activos y la protección del cliente. La FSA enfatizó que las plataformas no registradas operan fuera de su jurisdicción, lo que deja a los usuarios vulnerables a riesgos potenciales.
La protección del consumidor sigue siendo una prioridad
La FSA ha advertido que los clientes que utilizan intercambios no registrados pueden carecer de recursos legales o protección de activos. Esta brecha podría exponer a los usuarios a pérdidas significativas durante disputas o incidentes imprevistos.
Estos acontecimientos ponen de relieve el enfoque cauteloso de Japón respecto de la regulación de las criptomonedas. El país prioriza la protección y la seguridad del consumidor mientras mantiene su reputación como una nación amigable con los activos digitales.
Las políticas criptográficas reflejan objetivos estratégicos
La postura regulatoria de Japón refleja su estrategia financiera más amplia. El primer ministro Shigeru Ishiba afirmó recientemente que el país no integrará Bitcoin en sus reservas. La alta volatilidad de los activos digitales entra en conflicto con los objetivos de reservas financieras de Japón.
A pesar de las políticas estrictas, Japón ha adoptado los activos digitales de otras maneras. Las recientes reformas a las leyes de criptoimpuestos y los esfuerzos de estímulo económico subrayan el compromiso de la nación de fomentar la innovación.