La continua evolución de Internet ha pasado de la Web 1.0 (la versión de sólo lectura) a la Web 2.0, que es social y participativa. En la actualidad, la última Web 3.0 va un paso más allá al ofrecer descentralización y brindar a los usuarios el control sobre sus datos, mientras que los sectores de criptomonedas y blockchain están desarrollando productos para este sector. Por ejemplo, los consumidores pueden realizar pagos seguros entre pares y recopilar artículos digitales a través de billeteras criptográficas. Juntas, las tecnologías blockchain y Web3 tienen como objetivo mejorar la accesibilidad, la descentralización y la seguridad de Internet.
Tecnología de cadena de bloques
Blockchain utiliza la tecnología de libros de contabilidad digitales para registrar transferencias entre varias computadoras y al mismo tiempo garantizar la seguridad de los datos. Una cadena de bloques agrega cada transferencia a un “bloque”. Además, estos bloques están conectados entre sí en una “cadena” digital. La respectiva estructura descentralizada ofrece transparencia y resistencia al fraude a una cadena de bloques. Esta tecnología se utiliza en diversas aplicaciones, como criptoactivos como Bitcoin, intercambio seguro de datos en el sector sanitario y gestión de cadenas de suministro.
Web 3.0
Web 3.0 denota la última generación de Internet, haciendo hincapié en los sistemas peer-to-peer. A diferencia de la Web 2.0, donde las plataformas centralizadas controlan los datos de los usuarios y las interacciones en línea, la Web 3.0 utiliza la tecnología blockchain para realizar interacciones P2P sin necesidad de intermediarios. Esto tiene en cuenta las dApps y los contratos inteligentes en las redes blockchain, lo que ofrece más empoderamiento y seguridad al usuario.
La diferencia entre Web3 y Web2
La versión de Internet más utilizada es Web2, que depende de entidades centralizadas (como Amazon, Facebook y Google) para la gestión de datos y la prestación de servicios. Las respectivas empresas controlan los datos de los consumidores, lo que genera preocupaciones sobre la privacidad y un posible uso indebido de los datos.
Por el contrario, Web3 utiliza blockchain para la descentralización, lo que permite a los usuarios controlar sus propios datos para hacer que los intereses sean significativamente seguros y transparentes. Por ejemplo, en lugar de utilizar una plataforma de redes sociales que posea datos de los consumidores, los usuarios utilizarían una aplicación descentralizada para tener un control integral sobre su información. Web3 también admite los modelos comerciales más recientes, como las finanzas descentralizadas (DeFi), que permiten servicios financieros sin los bancos convencionales.
La Web 3.0 visualiza un mejor ecosistema de Internet que promete falta de permisos, falta de confianza y descentralización. También se centra en permitir la resistencia a la censura, los pagos nativos digitales y la propiedad digital. Blockchain juega un papel importante como tecnología clave para Web3 debido a su descentralización inherente. Permiten a todos crear identidades digitales, tokenizar activos y proteger información en cadena.
La conexión entre Blockchain y Web3
La tecnología Blockchain está profundamente conectada con la tecnología Web3. Opera como la base y la infraestructura que Web3 requiere para sus operaciones. La tecnología Blockchain proporciona un método seguro y descentralizado para la verificación y almacenamiento de datos. Web3 utiliza Blockchain para el desarrollo de aplicaciones descentralizadas que pueden operar sin intermediarios. Mejora la transparencia y la seguridad, alineándose con los principios básicos de Web3 de falta de confianza, descentralización, propiedad, vías de pago y resistencia a la censura.
Desconfianza
Las tecnologías criptográficas y blockchain eliminan el requisito de confiar en 3tercero parte, como un intermediario individual o un banco. Los consumidores de Web3 pueden realizar transferencias sin la necesidad de depender de ninguna entidad para sus operaciones.
Descentralización
El desafío central que enfrenta Web2 es el monopolio de las principales plataformas sobre los datos de los usuarios. Las criptomonedas y blockchain ofrecen descentralización al permitir una difusión más amplia del poder y la información. Por lo tanto, Web3 podría utilizar libros de contabilidad distribuidos impulsados por blockchain, lo que permitiría una mejor descentralización y transparencia.
Propiedad
Crypto proporciona herramientas como carteras criptográficas con custodia propia, que permiten el almacenamiento de fondos sin mediadores. Además, los consumidores pueden vincular sus billeteras a aplicaciones descentralizadas para utilizar los fondos de diferentes maneras. Además, cualquiera puede validar la propiedad de los fondos a través de un libro de contabilidad digital transparente.
Rieles de pago
Los criptoactivos ofrecen infraestructura para pagos nativos digitales en Web3. Por lo tanto, los activos digitales tienen el potencial de mejorar la pesada y costosa infraestructura Web2. Al no tener fronteras, no necesitan intermediarios.
Resistencia a la censura
Las plataformas blockchain son inherentemente resistentes a la censura y no permiten que ninguna parte cambie unilateralmente los registros de transacciones. Una vez que la cadena de bloques completa el registro de la información de la transacción, eliminarla se vuelve casi imposible. Esto podría ayudar a prevenir cualquier forma de censura.
Conclusión
Web3 puede proporcionar una solución para los grandes problemas que experimenta Internet hoy en día. De esta manera, pretende disminuir la concentración de poder en manos de los gigantes tecnológicos. Sin embargo, aún no se ha convertido en una esfera ampliamente adoptada. Sin embargo, las tecnologías que potencialmente subrayan los aspectos clave de Web3 ya están en desarrollo.
Las criptomonedas y blockchain suelen ser las principales tecnologías que promueven la revolución Web3. En este sentido, contribuyen sustancialmente a interacciones sin confianza, descentralizadas y resistentes a la censura. Además, los activos digitales y la tecnología blockchain pueden potencialmente allanar el camino para soluciones muy prometedoras en combinación con Web3. Esta fusión podría establecer nuevos estándares para el futuro de Internet, desbloqueando nuevas oportunidades para los usuarios sin comprometer sus derechos esenciales como la privacidad, la transparencia, la propiedad, la falta de confianza y la descentralización.